Las demoras de más de seis meses están creando problemas al Servicio de Salud del Principado (Sespa). Las estadísticas del mes de agosto se cerraron con un total de 776 pacientes con una espera de 181 días para poder entrar en quirófano. Esto supone cuatro veces las cifras que oscilaban el año pasado por la misma fecha.
Del total de pacientes en espera, el 30% es relativo a una intervención oftalmológica (operación de cataratas principalmente), el 22% al servicio de traumatología y el 15% cirugía general y digestiva.
En realidad, el volumen de pacientes que el pasado mes de agosto figuraban en las listas de espera es superior en las tres categorías en las que el Sespa cataloga las demoras quirúrgicas: las ya mencionadas de más de 181 días (con 581 personas más); las de entre tres y seis meses (1.270 más) y las de menos de tres meses (417 más).
Los peores resultados los arrojan los hospitales de las Cuencas. El Valle del Nalón, de Langreo, y el Álvarez-Buylla, de Mieres, registraron el mes pasado una espera media de 130 y 123 días respectivamente. En el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) la demora media para una operación fue de 115 días. La espera media de las personas que fueron intervenidas el mes pasado fue, en el conjunto de la región, de 106,8 días.